Hoy se cumplen 5 años del pontificado de Francisco, y damos gracias a Dios por un tiempo de tanto consuelo y luz para la Iglesia y el mundo. Oremos personal y comunitariamente por su persona y sus intenciones, y que el Señor nos haga a todos testigos deseosos de trasmitir al mundo la alegría del Evangelio. «Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia»: Dice San Agustín que «este nombre de Pedro le fue dado por ser la roca indestructible sobre la que descansan los cimientos y el conjunto del edificio de Jesucristo.» Se llama Pedro – roca- por su fidelidad, igual que a Cristo se le llama también Roca, compartiendo así el fundamento y el crecimiento. Cristo le confió su rebaño como Buen Pastor y él, que había sido débil, se convirtió en el soporte de todos para establecer sólidamente a los demás en el fundamento inquebrantable de la fe. Unidos con María, Madre de la Iglesia, colocamos bajo su maternal amparo el camino de quien guía como Sumo Pontífice a la comunidad cristiana. Que el Señor le ilumine, fortalezca y sostenga en su ministerio.