Queridos jóvenes contad conmigo. También yo cuento con vosotros. Pronto comenzaremos nuestros encuentros y una nueva reflexión que enviaremos al Papa como aportación al próximo sínodo de obispos, dedicado a vosotros: “Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional”. Te invito además a informarte e inscribirte si puedes a nuestras peregrinaciones a Fátima del 12 al 14 de mayo, y a Roma. Espero veros…. ¡Ánimo! «No os dejéis anestesiar el alma», os exhortaba el Papa Francisco.
Fue este verano pasado en Cracovia, ante los más de dos millones de personas que se concentraron en el inmenso Campus de la Misericordia. Francisco advirtió sobre no dejarse arrastrar por el «fuerte ‘doping’ del éxito», ni por «la droga del egoísmo», ni de «la propia comodidad». Este mensaje, que ha reiterado insistentemente, se une a su lamento por esos jóvenes que «parecen haberse jubilado antes de tiempo, y que tiraron la toalla antes de empezar el partido», y que viven «embobados y atontados», y «confunden la felicidad con un sofá». De modo igualmente contundente en su mensaje recomendó: «No os detengáis en la superficie de las cosas y desconfiad de las liturgias mundanas de la apariencia, del maquillaje del alma para aparentar ser mejores». «Por el contrario, instalad bien la conexión más estable, la de un corazón que ve y transmite el bien sin cansarse». Unidos a Cristo, cambiando el mundo con la fuerza de la generosidad.