La formación constituye un elemento nuclear de la Nueva Evangelización. “Estad siempre dispuestos a dar razón de vuestra esperanza”, dice el apóstol San Pedro a los cristianos» (1 Pe 3,15). La misma experiencia de la fe que, por su propio impulso ha de comunicarse, necesita conocerse con mayor profundidad para que pueda difundirse. Somos conscientes, sin embargo, de que teníamos una carencia, y que los fieles demandan un plan de formación dirigido al laicado. Por ello os animo encarecidamente a formar parte de este nuevo proyecto: el Instituto Diocesano de Teología para Laicos.
Nuestro papa emérito Benedicto XVI afirmaba frecuentemente que en la raíz de las crisis económicas y políticas siempre hay una crisis espiritual. Es cierto. Dios es necesario, lo más necesario para nuestra sociedad. El proyecto de eliminar a Dios ha fracasado porque cuando prescindimos de El queda amenazada y herida la existencia humana. Debemos, pues, proclamarlo: ¡Anúncialo! Sin embargo necesitamos prepararnos mejor para convencer, para dialogar y darlo a conocer. Es imprescindible familiarizarse con el pensamiento de hoy, reconocer la credibilidad de la fe, razonar la revelación, profundizar en nuestra fe para poder explicar la Verdad de Jesús, que es Camino y Vida para el hombre de hoy.
Pinchad aquí para descargaros el folleto explicativo ¡Ánimo!